El índice de resiliencia hace una medición respecto de la capacidad de mantener la continuidad de la operación de los registros, a pesar de la emergencia sanitaria que afectó al Ecuador. Esto implica la utilización e implementación de medios y canales electrónicos para la prestación de servicios registrales. Considerando las capacidades económicas y de recursos de cada uno de los registros, se estableció como mecanismo de medición, aquellas actividades que podían ser comunes para todos los registros.